Este campanario se encuentra en la cima del monte Paldalsan, en la ciudad de Suwon. Fue construido por el amor filial del rey Jeongjo hacia su padre Sado Seja (rey póstumo Jangjo). Las campanadas se realizan tres veces: una para agradecer a los padres, otra por la felicidad de la familia, y la última para la propia prosperidad.